Mis 3 imperdibles del Persa Bio Bío

Si andas buscando algún panorama santiaguino para el fin de semana, te recomiendo que te quedes leyendo, porque si eres un Diógenes de los de verdad, con estos datos te vas a inspirar.
Si tuviéramos que hacer una lista de las cosas que disfrutamos los Diógenes, creo que en el top 3 encontraríamos: cachureos y objetos, comidas varias y el, maravilloso pero poco comprendido, busquilleo. En ese sentido el persa Bio bio y el barrio Franklin concentran todo aquello y mucho más, por eso para mí siempre es bueno abrir o despedir el fin de semana con un paseíto por esos barrios.
La verdad, tenía pendiente hablarles de este panorama hace varios meses, cuando recién abrió la Factoría Franklin y fuimos a conocerla, pero como a veces me gana la rueda del cotidiano y las ideas se me van quedando tiradas en la bolsita del olvido, no lo hice hasta ahora, que fui la semana pasada a darme una vuelta y reuní las ganas que me faltaban para escribirles este post.
Creo que es imposible detallar todo lo que incluye este paseo, porque son tantas las cosas que hay por ver, probar y vitrinear, que es mejor ir y dejarse sorprender. La cantidad de tiendas de antigüedades, ropa y gorros, vinilos, menaje, plantas, y los infinitos puestos de emprendedores y creativos de distintos rubros, es algo que hará sentir en su salsa a cualquier Diógenes, por muy proto que sea. Por eso, los invito a ir a darse una vuelta al barrio cualquier sábado o domingo y aprovechar de conocer estos 3 datitos que les voy a dejar en mis recomendados:
  1. Lámparas Veracruz (Víctor Manuel #2294, Santiago)
Su puesto está ubicado en el Persa Víctor Manuel y tal como lo indica su nombre, en él van a encontrar muchas lámparas, pero no de cualquier tipo. El creador de esta marca se dedica a recolectar objetos antiguos y en desuso, y no me pregunten cómo, pero misteriosamente los transforma en una lámpara original y en un objeto entretenido digno de ser exhibido. Así es como puede que te pilles una tetera hecha lámpara, o un patín roller, teléfonos o cámaras antiguas y así, realmente es tanto el ingenio que te vas a sorprender.
Demás está decir que como todos los objetos que se usan para crear las Lámparas Veracruz son únicos en su especie, no encontrarás una lámpara igual a otra, por lo que te recomiendo que si te gusta alguna, no lo pienses mucho, porque es posible que cuando vuelvas ya no esté.
Para ver más sobre Lámparas Veracruz, puedes visitar su cuenta de Instagram en https://www.instagram.com/lamparasveracruz/?hl=es
  1. Factoría Franklin (Franklin #741, Santiago)

Lo bonito de este lugar es ver cómo entre emprendedores recuperaron un antiguo espacio industrial de este barrio (que tiene como pinta de haber sido un hospital o algo por el estilo) y crearon una experiencia en base a oficios y producciones locales. Lo mejor es que los fines de semana puedes ir a conocer las instalaciones de las distintas marcas y probar sus productos.
Aquí encontrarás marcas nacionales como por ejemplo la destilería y chocolatería Quintal, cuyos productos (gin y chocolate) he probado y puedo dar fe que son 10/10 y una excelente opción para hacer regalos originales y creados en Chile.
Si andas con hambre, puedes pasar a la recientemente inaugurada “Barra de Pickles” de By María y además de comerte un sanguchito con todo el sabor de sus pickles y salsas, puedes aprovechar de comprar en su tienda, donde encuentras desde pepinos en conserva hasta tote bags de la marca con un diseño hermoso (obvio que yo compré uno J). Y para terminar el almuerzo, puedes pasar a dar el broche de oro a la barra de Café Andariego y tomarte un cafecito o comprar café para disfrutarlo en tu casa.
Por otro lado, si lo que te aqueja es la sed, te gustará conocer la cervecería Alchimia Brewstillery, ubicada en el segundo piso, donde podrás ver sus instalaciones, pedir una muestra gratis (siempre bienvenida), tomarte un chopito o pedir en botella para llevar, o bien puedes ir a stockearte de brebajes a la tienda de Gin Malabar (también probado, también recomendado).
En fin, son más de 20 emprendedores que dan vida a este colectivo de creativos relacionados al rubro gastronómico y artístico y que estoy segura, te regalarán una tarde de curioseo muy entretenida.
  1. Fuente de soda “Don César” (Av. Santa Rosa #2098, Santiago)

Este es un dato para los Diógenes buenos pal diente, como una J, porque no hay nada mejor que sellar nuestros panoramas con buena comida, y porque en serio hay conocido un lugar más amable que este, que cuando te pides un sanguchito, viene con consomé? Hueá hermosa po.
Esta fuente de soda es atendida por su dueño, un señor que me imagino se llama César, es bien simpático y tiene un muy buen gusto en lo ornamental y en cuanto a sabores, porque te sientas rodeado de plantitas y cuadros musicales y te enfrentas a la difícil misión de elegir sólo una de las opciones que hay en su carta.
La dinámica es más o menos así: tú eliges la carne y el tipo de pan (si eres vegetariano como este pechito, puedes reemplazar la carne por un omelette de verduras que ni te cuento lo rico), y luego eliges entre 7 mixes de ingredientes para el relleno, cada uno más rico que el otro. Todos vienen con papitas (la cantidad precisa) y su salsita correspondiente, y por supuesto, puedes acompañarlo con una cerveza, sangría o jugo, como sea tu preferencia.
Mi recomendación? Yo no soy de dejar comida en el plato, pero este lugar vaya que te lo hace difícil. Como yo prefiero comerme las papitas antes que llenarme con pan, le saco el pan de arriba y así hago que todo el resto entre y se acomode de lo lindo en mi estomaguito bondadoso. Puedes seguir mi técnica o buscar la tuya propia, te deseo suerte de todas formas.
 
Y bueno, eso es todo por esta vez. Espero que les tinquen y les gusten mi recomendaciones, y si van, que tengan un día lleno de objetos y sorpresas bonitas.

Con cariño, Diógenes.